Empoderarse: reconocer los síntomas de un ataque cardíaco podría salvarle la vida
Por Lauren Amphlett

En el ajetreo y el bullicio de nuestra vida diaria, a menudo pasamos por alto los signos sutiles de enfermedad que nos indica nuestro cuerpo, ignorando dolores y molestias menores. Esta tendencia, sin embargo, puede resultar peligrosa, especialmente cuando se trata de reconocer los síntomas de un ataque cardíaco.

Una encuesta reciente realizada por el NHS de Inglaterra revela una realidad preocupante: muchas personas no se sienten seguras a la hora de identificar los signos de un ataque cardíaco, y las cifras son notablemente más altas entre los mayores de 55 años. Esta falta de conciencia podría ser una cuestión de vida o muerte, especialmente para personas con enfermedades crónicas que podrían atribuir erróneamente los síntomas de un ataque cardíaco a sus dolencias existentes.

La campaña 'Ayúdanos, ayúdate' del NHS de Inglaterra pide que todos adquieran conocimientos sobre los síntomas de un ataque cardíaco y actúen con prontitud llamando al 999 si sospechan que ellos o alguien a su alrededor está sufriendo un ataque cardíaco.

Los síntomas de un ataque cardíaco pueden ser difíciles de detectar y pueden variar de persona a persona. El síntoma más común es el dolor en el pecho, a menudo descrito como una sensación de presión, pesadez, opresión o opresión en el pecho. Sin embargo, los síntomas también pueden manifestarse de otras formas, como dolor en los brazos, la mandíbula, el cuello, la espalda y el abdomen, aturdimiento, sudoración, dificultad para respirar, náuseas, vómitos, una sensación abrumadora de ansiedad, tos o sibilancias.

Los relatos de Asif y Gemma, sobrevivientes de un ataque cardíaco, subrayan la importancia de prestar atención a estas señales. Gemma inicialmente descartó sus síntomas como malestar inducido por el ejercicio, mientras que Asif confundió los suyos con una intoxicación alimentaria. Sus historias son un claro recordatorio de que un retraso en la búsqueda de ayuda puede provocar un daño grave al músculo cardíaco, lo que afecta la calidad de vida después de la recuperación.

Para las personas que padecen enfermedades crónicas, es fácil caer en la rutina de atribuir todas las molestias a la dolencia existente. Sin embargo, esta mentalidad puede ocultar la aparición de otras afecciones graves, como un ataque cardíaco. Es imperativo escuchar su cuerpo, comprender sus señales y buscar atención médica cuando algo anda mal.

La campaña del NHS England también arroja luz sobre la confusión común entre ataques cardíacos y paros cardíacos. Mientras que un ataque cardíaco es un problema de circulación causado por una obstrucción que inhibe el flujo sanguíneo al corazón, un paro cardíaco es un problema eléctrico en el que el corazón deja de latir repentinamente. Comprender esta distinción es crucial ya que la respuesta inmediata requerida para cada uno difiere significativamente.

La campaña 'Ayúdanos, ayúdate' es más que un simple eslogan; es un llamado a la vigilancia pública y un paso hacia el fomento de una cultura de atención médica proactiva. Al educarnos y actuar con prontitud, salvaguardamos nuestra salud y contribuimos a una comunidad donde la intervención oportuna se convierte en una norma y no en una excepción.

Con más de 84,000 ingresos hospitalarios por ataque cardíaco en Inglaterra durante 2021/22, no se puede subestimar la urgencia de este mensaje. Visite nhs.uk/heartattack para obtener más información. Su rápida acción podría ser un rayo de esperanza para usted y los demás, asegurando que los latidos del corazón sigan resonando con vitalidad.